Anteayer lleguè a un parteaguas en mi vida, empezè a hablar.
Yo antes era un tipo màs bien callado, excepto cuando me volvìa loco ladrando cuando mi compadre bòxer Hogan ladra o cuando alguien pasa frente a la puerta o cuando alguien camina en la azotea o cuando...bueno, captan la idea, verdad?
La cosa es que ladro mucho pero nunca hablo con mis humanos (asì se llaman entre ellos pero en idioma secreto de perro se llaman "mascotas de dos patas") aunque ellos sì hablan mucho conmigo. Eso era hasta antier.
El lunes mi mami comìa unos riquìsimos tacos de papa con mucho queso y crema y yo frente de ellas, vièndola con ojitos de caricatura japonesa y luego viendo el plato y suspirando, mi tàctica usual y NADA!!!!! mi mejor carita de Remi no daba resultado!!!!
Y entonces tuve una epifanìa, me llegò la inspiraciòn y empezè a regañarla en el mismo exactìsimo tono que ella usa cuando me reclama algo a mi y que me suelto: "apapapaguabafafa!!! cucgrubuñufubafa!!!!" le dije, y volteò muy sorprendida, yo seguì en mi diatriba: "guùfu, geafababafaguafu tofudofu" y entonces se riò ( no se porquè si yo estaba bien serio) y me diò parte de su taco.
En la noche repetì el regaño con mi tìa y me ganè mi pedacito de enfrijolada.
Les digo chicos, no es lo que les digan, es el TONO en que se los dicen lo que los hace reaccionar, intèntenlo!
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